Camino a Albania, uno de los países más pobres de Europa, va y se nos ocurre la repentina idea de parar en un sitio que nos había llamado la atención navegando aleatoriamente por Google Maps. Paradojas de la vida viajera, ese sitio resulta ser Sveti Stefan, un rincón de la costa de Montenegro donde el lujo y la exclusividad adquieren una dimensión estratosférica. La visita a este sitio de postal del Adriatico, parcialmente truncada por nuestro desconocimiento e ingenuidad, no nos ha dejado indiferentes. Si quieres saber por qué, te aconsejamos que sigas leyendo nuestra experiencia en uno de los sitios más curiosos de la costa montenegrina. Porque salta a la vista que se trata de un sitio especial, de catálogo, de postal, ¿verdad?
Índice de contenido
De isla de pescadores a residencia veraniega de celebrities
Sveti Stefan (San Esteban en castellano) fue en su día un pequeño islote aislado una decena de metros del continente. Sobre su accidentando terreno y diminutas dimensiones, los pescadores de la zona construyeron sus casas, con la clásica piedra de los Balcanes y sus tejados rojos, creando un laberinto de calles estrechas que ríete tú del casco histórico de Budva. Para rizar el rizo, y para evitar ataques enemigos y protegerse de las embestidas del mar, se construyó una muralla defensiva alrededor del reducido perímetro de la isla, convirtiendo a Sveti Stefan en una especie de isla-fortaleza.
Los caprichos de la naturaleza han querido que Sveti Stefan sea hoy una isla unida a tierra por un estrecho istmo natural. Su singular orografía recuerda parcialmente a San Juan de Gaztelugatxe, en Bizkaia, o al no menos mítico ‘ratón de Getaria‘, en Gipuzkoa.
Lo que fue una tranquila y apacible antigua aldea de pescadores ha cambiado mucho desde mediados del siglo XX. Es en esa época cuando los pescadores que habitan la isla son expulsados animados a abandonar sus casas. Alguien con muy buen olfato para los negocios decide entonces construir una pasarela artificial sobre el istmo y decide emprender la aventura de convertir la isla entera en el hotel de lujo más exclusivo de Montenegro.
La voz de la lujuria se corre rápido. Desde entonces han sido muchos los famosos y las celebrities, especialmente del mundo del cine y de la moda, que han pasado sus vacaciones en Sveti Stefan, alejados del mundo y de los paparazzi. Es más, son los propios famosetes quienes han dado a conocer, más si cabe, este peculiar islote, contribuyendo a engrandecer las leyendas y rumores que pululan en torno a este capricho geológico al sur de Montenegro. Porque lo que pasa en Sveti Stefan, se queda en Sveti Stefan.
Información práctica para visitar Sveti Stefan
Muy cerca de Budva, circulando por la carretera de la costa de Montenegro, para visitar Sveti Stefan hay que desviarse ligeramente y descender poco más de un kilómetro por una carretera con curvas de herradura que baja hasta el nivel del mar.
La primera sorpresa llega cuando abajo del todo, te topas con una cola de coches que esperan ante una barrera que presagia un aparcamiento de pago. Que lo es. Como hacen en muchos puntos de Italia, los aparcamientos a pie de playa son el negocio más fácil jamás inventado, y la idea no viene del MIT, no. En toda la carretera de bajada no hay ningún sitio para aparcar, aunque siempre hay algún piratilla que deja el coche malamente aparcado en las escasas cunetas que existen. Hay gente que opta por dejar el coche arriba del todo y desciende la vertical, por un camino pavimentado con escaleras, que sirve de atajo entre las curvas de herradura.
Lo cierto es que el parking de Sveti Stefan es caro, cerca de 2€ la hora. Coges el ticket al entrar, y pagas al salir en una cabina donde la persona que te atiende ‘redondea’ las horas como nadie.
Hay dos explanadas de aparcamiento, una subiendo a mano derecha y otra a mano izquierda. A pesar de ser una hora bastante prudente, nosotros perdimos algunos preciados minutos en encontrar un sitio para dejar nuestro coche de alquiler. Se ve mucho turismo en Sveti Stefan.
Playas de Sveti Stefan
Tras el inevitable vistazo a los bien cuidados jardines de la zona, la primera tentación es descender a la playa situada la izquierda del islote.
Es una playa pública, de guijarros bastante pronunciados, con sus hamacas y sombrillas. A diferencia de otras playas de Montenegro, se percibe que la playas de Sveti Stefan son frecuentadas por gente de nivel adquisitivo medio-alto, casi todos ellos, turistas.
Solo pensar lo que cuesta el día entero de parking, suponemos que el pack hamaca-sombrilla, junto con la cerveza y el snack en el chiringuito, irán en consonancia.
Nos movemos hacia el otro lado del istmo, para contemplar la playa del lado derecho. “Qué poca gente hay“, pensamos para nuestros adentros desde el murete que asoma al bello arenal.
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Esta playa está más limpia y cuidada, parece que tiene incluso arena, como las playas de Kastel Kambelovac.
En la vida, casi todo tiene una explicación. En este caso, la segunda sorpresa del día viene al comprobar que esta segunda playa es una playa privada, semi-exclusiva para los clientes del hotel de Sveti Stefan. Digo ‘semi’, porque a ver, si eres de Bilbao y tienes algo de calderilla en el bolsillo, tú también puedes ir a la playa, codo con codo con las celebrities. Será por dinero…
Isla ‘cerrada’ en exclusiva para clientes del hotel Aman Sveti Stefan
La tercera sorpresa de la jornada viene al inicio de la pasarela que conecta el continente con la isla de Sveti Stefan. Nos disponemos a cruzar la pasarela como quien desfila por la Berdinale, hasta que un guardia de seguridad, muy educadamente, nos comenta que no podemos pasar. Ante nuestra cara de incredulidad y pregunta de si hay que pagar entrada, nos contesta que solo los clientes del hotel pueden acceder a la isla. Vamos, que los turistas no pueden acceder al islote, ni tan siquiera recorrer parte de la pasarela. Venga, todos al unísono: ¡Porca miseria!
Siendo sinceros, para el turista que decide visitar la zona y no conoce las ‘normas locales’, Sveti Stefan es una especie de enorme fiasco viajero. Sinceramente, nos dio mucha pena no poder entrar a recorrer y fotografiar las callejuelas de ese antiguo poblado de pescadores, ahora reconvertido en isla-hotel de lujo. Te ponen el caramelo en los labios con esa estampa turística idílica, y luego no te dejan morderlo. Pues vaya :(.
Por otra parte, pensándolo fríamente, si los clientes del hotel están pagando una pasta gansa por estar tranquilos y alejados de las masas turísticas, aislados en un ambiente de lujo y exclusividad, concentrados en disfrutar y desconectar, es entendible que no dejen pasar al bullicioso turista de a pie, que enseguida destrozaría ese aura de bienestar que rodea a Sveti Stefan.
La cadena de hoteles de lujo que gestiona esta isla y complejo hotelero se llama Aman. El complejo adults-only se subdivide en una zona de alojamientos y servicios wellness en la propia isla (abierto del 1 de Mayo al 18 de Octubre), y otra en tierra firme, denominada Villa Milocer, que abre todo el año y está situada en una cala adyacente. Que conste que no nos pagan por esto, pero si quieres ponerte los dientes largos, te animamos a que eches un vistazo al vídeo presentación del hotel Aman Sveti Stefan. No nos hacemos responsables si rayas la pantalla del móvil o el suelo ;).
Paseo costero hasta las playas ‘reales’
Con cara de tontos -y pobres-, por aprovechar la hora de parking, decidimos caminar por el paseo marítimo e intentar obtener nuevas panorámicas de la isla más famosa de Montenegro.
A través de un paseo costero pavimentado, en cuestión de cinco minutos se rodea un pequeño saliente cubierto por un tupido bosque. Con varios bancos donde sentarse a disfrutar de las vistas hacia la bahía de Budva, se abre ante nosotros una pequeña ensenada decorada con otra playa de ensueño.
Se trata de King’s beach (‘playa del rey’), que tiene a su homóloga ‘Queen’s beach‘ (‘playa de la reina’) en la siguiente cala. No nos atrevemos a afirmar si estas playas son públicas, privadas o semi-privadas, pero lo cierto es que frente a la primera playa se sitúa el Hotel Villa Milocer, antigua residencia real y parte continental hoy del complejo resort de lujo Aman Sveti Stefan. Completa el tridente un lujoso centro de spa y aguas termales frente a la ‘playa de la reina’. ¿Qué reyes y reinas habrán pasado aquí sus periodos estivales? Qué más da, lo cierto es que se trata de un sitio de alto standing único.
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Esta playa también dispone de un pequeño paseo marítimo y una zona de precioso jardines, a la que se puede acceder por la estrecha carretera local que recorre la localidad de Sveti Stefan. Las vistas hacia la zona de Budva, con el azul Adriático de telón de fondo y el contraste de la masa arbórea, son espectaculares.
Lujo en la costa de Montenegro
Terminamos nuestra visita express a Sveti Stefan mirando la carta -por curiosidad- del no económico restaurante del complejo. En el pequeño centro comercial adyacente debe haber alguna otra opción algo más económica, tanto para comer como para tomar algo, pero sinceramente, visto lo visto, se nos quitaron las ganas. Manías nuestras.
Dejamos a Izaro que juegue en el parque infantil situado en los aledaños de los jardines, que no es adults-only y es gratuito.
No íbamos preparados ni debidamente informados, y lógicamente, el no poder visitar la isla de Sveti Stefan nos fastidió mucho, más después de entrar en la ‘ratonera’ del parking. Carretera y manta, agur Sveti Stefan!
Ahora, tanto nosotros como vosotros, ya sabemos las habas que cuecen en la perla montenegrina. Y ojo, pasada la lógica pataleta viajera, no descartamos comprarnos una enorme hucha y ahorrar para una escapada romántica a la isla de Sveti Stefan, para disfrutar a todo trapo de este hotel de lujo en la costa de Montenegro.
A quién le amarga un dulce montenegrino, ¿verdad? Recuerda que una escapada en pareja al año, no hace daño ;). Estamos convencidos de que la exclusiva experiencia en el hotel Sveti Stefan merece mucho la pena. Maybe some day…
¿Qué te parecen a ti este tipo de idílicos complejos hoteleros cerrados a cal y canto al público, preservando la exclusividad de sus clientes? Visto lo visto, ¿visitarías o te alojarías en Sveti Stefan? Si has visitado algún resort de lujo similar, anímate a contarnos tu lujuriosa experiencia al respecto, ¡queremos que nos des -todavía más- envidia! 🙂
Información práctica:
- La mejor manera de llegar a Sveti Stefan es el coche. Son apenas 10 kilómetros de distancia desde Budva.
- El aparcamiento junto a la isla es de pago (2 €/hora aprox.).
- Visita realizada en Junio del 2017.
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- Mapa con la ubicación de Sveti Stefan en la costa de Montenegro
Saludos!
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