Extasiados con tanta belleza natural en días pasados de nuestro roadtrip por Eslovenia, teníamos claro que el sexto día lo íbamos a dedicar a hacer algo de turismo cultural en los alrededores del lago Bled. Sí, nos dejamos llevar por la recomendaciones de la ‘amiga Lonely‘, y decidimos visitar la pequeña y pintoresca localidad de Radovljica.
10 minutos de trayecto en coche desde Bled, por buena carretera, nos plantan en este pueblo de difícil pronunciación. Aparcamos en las ‘afueras’, en una zona donde no hay que abonar aparcamiento, pero en cuestión de 5 minutos caminando, nos plantamos en la entrada al casco histórico de Radovljica, que es su principal atractivo turístico.