Gijón tuvo pasado romano, y así lo atestiguan los vestigios encontrados en esta vibrante ciudad asturiana que se asoma desafiante al Cantábrico. Sin embargo, y aunque parezca mentira, a día de hoy nadie sabe ni se ha podido demostrar cómo se llamó el asentamiento romano que se estableció en esta parte de Asturias allá por el siglo I d.C.
Misterios aparte, lo que sí sabemos a ciencia cierta es qué hacer y qué ver en Gijón. Y una de las visitas imprescindibles, sencilla, gratuita y saludable, es darse un agradable paseo por el pasado marinero de la villa, por su casco histórico. Para ello, te proponemos visitar el barrio de Cimadevilla (Cimavilla en asturiano), todo un emblema para capturar la esencia de lo que fue, es y será la bella Xixón.